Diseñamos y construimos entornos apropiados que propicien un desarrollo desde dentro hacia fuera, en servicio a la regeneración de nuestra casa, de la comunidad, del planeta tierra.
Mediante constantes procesos de revisión conjunta y abierta de las formas en las que abordamos la búsqueda de soluciones a algunos de los problemas más críticos de nuestro mundo, como la agricultura, la energía, el agua potable, la justicia social y las prácticas empresariales éticas, buscamos desarrollar una mirada más sensible y perceptiva, a partir de la cual seamos capaces de valorar las voces de todas las personas, ampliando la gama de puntos de vista, creando un espacio en el cual la gente se sienta apoyada y, sobre todo, capacitada para crear el cambio necesario... comenzando, cada uno, consigo mismo.

Somos diseñadores y tejedores de comunidades, y creemos que la mejor manera de coordinarse es en el contexto de unas relaciones sanas, construidas a partir de una resonancia en la confianza, el respeto y del trabajo colaborativo y conjunto. No es rápido, aunque sí es constante. La importancia de recuperar el concepto de "vecino", como esa persona en la que podemos confiar y que va a "estar ahí" para los demás a lo largo del tiempo.
Fomentamos un clima de inclusión, un entorno en el que todas las personas puedan sentirse valoradas; un espacio que favorezca la oportunidad de establecer vínculos significativos entre todas las personas.
Apreciamos la diversidad de la humanidad, una diversidad que incluye diferencias de sexo, edad, raza, etnia y origen nacional, gama de capacidades, orientación sexual, identidad de género, medios económicos, educación y perspectiva política.
Estas creencias y prácticas se aplican a todas las actividades de nuestra organización; en ellas se basan todas nuestras decisiones.
Nuestra tierra, nuestra tradición, nuestros recursos y nuestras comunidades son un bien común. ¿Cómo podemos volver a entender que gobernar nuestros recursos compartidos es una responsabilidad compartida? Restaurar una visión del mundo mediante la cual entendamos la importancia de los "bienes comunes" y de nuestra capacidad para gobernar colectivamente es el núcleo de nuestro propósito.
Para refrescar y redefinir nuestras ideas de propiedad, gobernanza e integridad, estamos diseñando y experimentando con nuevas y antiguas (recordadas) formas de trabajar juntos, compartir recursos, tomar decisiones en grupo y de cómo administrar los bienes comunes y los recursos comunes.


Como tejedores, diseñadores y conectores, sabemos el poder de la transparencia y de los mapas compartidos para ayudarnos a navegar colectivamente por el espacio y el tiempo que habitamos. Quienes poseen los mapas tienen el poder de dictar hacia dónde vamos. Y en este momento de desorientación y aislamiento brutal, necesitamos mapas fiables más que nunca, para encontrarnos, comunicarnos, y volver a hacer juntos. Más cerca.
Trabajamos de forma colaborativa para crear sistemas de relaciones espacio/tiempo (mapas): de nuestros ecosistemas, de las personas, organizaciones, proyectos, recursos, habilidades y de las necesidades de las comunidades de las que formamos parte.
Nos centramos especialmente en la cartografía a escala bio-regional, que permitirá construir una base desde la cual podamos favorecer un contexto a partir del cual imaginar, diseñar y crear formas de participar activamente en la gestión de las comunidades de las que somos parte, así como de la tierra que nos rodea, para que vuelvan a ser procesos colectivos, colaborativos e inclusivos, respetuosos con el medioambiente y con las generaciones futuras.
Creemos en un enfoque holístico y equilibrado entre 3 pilares: sostenibilidad, inclusión y estética, con un énfasis en iniciativas interdisciplinares que combinen arte, cultura, inclusión social, ciencia y la tecnología.
La re-naturalización de los paisajes mediante la restauración de la biodiversidad mejora la sostenibilidad; el patrimonio cultural y tradicional puede promover conceptualizaciones estéticas; y pensar en nuevas formas de atraer una mayor participación de los ciudadanos es una manera de contribuir a la inclusión, siendo la cultura un motor importante de una sociedad inclusiva.
La protección, el recupero y la restauración del patrimonio natural y cultural es prioritario para el saludable desarrollo de los seres humanos, y transmitir a las nuevas generaciones el amor y el cuidado por el entorno que habitamos es una acción fundamental que debe ser realizada sin demora.
"Arte es sensibilidad para lo necesario".
Entendemos el Arte como la belleza de reconocer la necesidad esencial. Es la expresión de lo que necesita ser para armonizar con la necesidad de su entorno.


Como tecnólogos, desarrolladores de software y diseñadores con décadas de experiencia, vemos la oportunidad para que la tecnología aumente la interconexión y la cooperación sin coerción ni manipulación.
Creamos herramientas que mapean relaciones, recursos, necesidades, habilidades y ofertas, y que permitan a las personas coordinar acciones colectivas, activándolas para participar en la regeneración del mundo.